Tan sólo un abrazo desencadena sustancias químicas que ayudan a reducir el estrés y a entablar lazos emocionales. La piel posee receptores sensitivos que envían señales a la corteza cerebral. Georgina Montemayor, académica del departamento de anatomía de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de Estados Unidos, explica que al recibir un abrazo, un apretón de manos o una caricia, el cerebro libera oxitocina, también conocida como hormona del cariño, la cual permite el apego y que los seres humanos se busquen los unos a los otros. Eso explica por qué las mujeres pasan gran parte del tiempo con amigas y por qué les gusta ser abrazadas constantemente. Las mujeres no abrazan así, incluso hasta nos mecemos al abrazar; a los varones esa cercanía los pone nerviosos.
Una frase bonita tiene el poder de transmitir emociones, generar sonrisas y fortalecer tus relaciones. Son pequeños regalos que, cuando se entregan con sinceridad, pueden alegrar el día de alguien y dejar huella. Una sencilla frase puede transmitir un torrente de sentimientos en tan solo unas palabras. Es asombroso cómo con pocas palabras se puede transmitir tanta belleza y significado. Dicen que quien tiene un amigo, tiene un tesoro. Son esos confidentes que nos acompañan a lo largo de nuestra vida y nos brindan su apoyo incondicional. Son esa familia elegida que comparte nuestras alegrías y tristezas.
La clave de toda relación. Se claro y comparte con tu pareja lo que te gusta, lo que deseas y cómo te sientes y de igual manera aprende a escuchar. La confianza es base en las relaciones de pareja. Hacer el amor. Los motivos que utilizamos para explicar las relaciones entre personas heterosexuales del mismo sexo son muy diferentes si hablamos de hombres y chicas. No ocurre lo mismo con los hombres heterosexuales: si en una fiesta un hombre besa a otro en la boca, o le magrea en el trasero - actos considerados normales dentro de la heterosexualidad femenina, la explicación sólo puede ser una, y es que es un homosexual reprimido. Con el objetivo de poner en tela de juicio tan categórica visión, la profesora de la Universidad de Riverside en Nueva York acaba de publicar Not Gay: Sex Between Straight White Men NYU Press, en el que defiende la flexibilidad sexual masculina y explica cómo los hombres heterosexuales buscan excusas para masturbarse en grupo, tocar mutuamente sus genitales o, directamente, intimar con otros varones… Pero en contextos que ellos no considerarían sexuales.
